Prevenir el calor durante la jornada laboral en verano
Ya está aquí el verano y con él llegan las altas temperaturas. Muchos tienen la suerte de trabajar en espacios con aire climatizado, por lo que el calor no es un inconveniente para su salud y productividad, pero otros no tienen tanta suerte y el calor es el protagonista de su jornada laboral.
El estrés térmico es muy peligroso para aquellos trabajos desempeñados al aire libre (construcción, agricultura…) donde se pueden sufrir desde quemaduras hasta fatídicos golpes de calor.
En primer lugar, aprendamos a identificar el estrés térmico, que se produce en tres etapas:
- En la primera etapa se mostrará una falta de concentración y de memoria, una disminución de la capacidad de movimiento y fatiga.
- En la segunda etapa se mostrará sed, agotamiento, dolor de cabeza, calambres, mareos y náuseas.
- La tercera etapa es fatídica y se caracteriza por el colapso y desmayos, impidiendo que el oxígeno llegue al cerebro, pudiendo llegar a sufrir un golpe de calor, donde la persona muestra confusión, irracionalidad, falta de sudor y pérdida de conciencia. Si no se detecta a tiempo puede llegar a la muerte.
Para evitar estos casos os traemos unos consejos y medidas preventivas de cara a los accidentes laborales relacionados con las altas temperaturas del verano:
- Lo primordial es que en todo momento se sepa las condiciones climatológicas. Desde la empresa se debe informar a los trabajadores de ello.
- Limitar al máximo aquellas tareas que requieras un esfuerzo físico desmesurado y facilitar herramientas mecánicas para desempeñarlas. Además, se deberá realizar una planificación de las tareas de tal manera que aquellas que requieran un mayor esfuerzo físico se realicen en la horas de menor calor.
- Que haya siempre al alcance de todos los trabajadores agua potable para evitar así la deshidratación. Por su parte, los trabajadores deberán beber pequeñas cantidades cada 10/15 minutos.
- Que las zonas de descanso de los trabajadores tengan sombra y ventilación adecuada.
- Limitar el tiempo que los trabajadores pasan ante la exposición solar y aumentar las pausas de descanso cada 45 minutos como máximo.
- Los EPIs deberán ser de tejido ligero, colores claros y amplios, y se les añadirá protecciones de cabeza (sombreros o gorras). El Calzado no sólo el adecuado para prevenir todo tipo de riesgos inherentes al trabajo realizado sino también transpirable y cómodo. Además, los trabajadores deberán aplicarse protector solar diariamente y reaplicarlo durante la jornada laboral.
- Tal vez, lo más importante sea informar a los trabajadores sobre los riesgos, los efectos adversos y las medidas preventivas y primeros auxilios necesarios en estos casos.
Esperamos haberos ayudado y que lo pongáis en práctica lo antes posible. ¡La seguridad es lo primero!