Gestión del estrés con prevención de riesgos laborales
¿Puede ser el estrés un factor de riesgo a la hora de padecer una enfermedad profesional? Muchas personas padecen estrés en el ámbito laboral que puede derivar en serias enfermedades o despistes que provoquen accidentes en el puesto de trabajo.
La prevención de riesgos laborales también implica gestionar este punto.
GESTIONAR EL ESTRÉS DESDE EL PUESTO DE TRABAJO
Es necesario aprender a canalizar los momentos de máxima carga de trabajo. Las pautas que detallamos a continuación serán útiles para rebajar el estrés.
RESPIRAR ADECUADAMENTE
Cuando una persona se siente abrumada o tensa, bastará con unos minutos de respiración profunda para restablecer el equilibrio. Es importante inhalar durante cinco segundos, manteniendo la respiración y exhalando en cantidades iguales a través de la nariz. Aprender a meditar puede reducir los niveles de estrés.
PROGRAMAR EL DÍA
Nos pasamos el día intentando mantener el máximo nivel de concentración durante horas. No obstante, la productividad disminuye al alcanzar un umbral determinado. Se aconseja programar descansos durante todo el día para caminar o estirar tras 90 minutos de trabajo. Listar las actividades que se deben hacer para proteger nuestra salud, como el uso de la EPI, es otra recomendable práctica.
ALIMENTARSE ADECUADAMENTE Y DESCANSAR
Una mala alimentación puede propiciar un mayor nivel de estrés. Es recomendable consumir una dieta baja en azúcares y alta en proteínas, que nos provea de energía saludable para sobrellevar los periodos de máxima carga. Además, es conveniente disminuir el consumo de bebidas estimulantes, como el café, y sustituirlas por infusiones o agua con gas.
Dormir es esencial para “resetear” el cerebro tras una larga jornada de trabajo. Un descanso reparador permite disminuir los niveles de cortisol en la noche, una de las hormonas responsables de mantener el estado de “alerta” en el organismo.
En definitiva, la prevención de riesgos laborales y el manejo del estrés resultan imprescindibles para cuidarnos en el entorno de trabajo.